Yo no quería verla, bueno, quizás no era mi prioridad, prefería ver "Argo", sin embargo, mi novia insistió y pensé que sería una buena idea echarle un ojo, la verdad y después de ver los acontecimientos que sucedieron en la gran pantalla, fue un craso error.
No nos engañemos, Sinister es la nueva patraña del cine norteamericano, una nueva patraña para que los ignorantes (Entre los que me incluyo yo) fueran al cine a dejarse los cuartos, en una película que no tiene "Ni chicha ni limoná" Una verdadera decepción que promete mucho, pero solo nos da una buena interpretación de un Ethan Hawke, que parece volver a los fueros del cine comercial, un lugar de donde nunca debía haber salido.
Hawke es un padre de familia que escribe libros, basados en crímenes, por casualidad encuentra unas cintas grabadas en Super 8, en todas se ven terribles asesinatos, cometidos a sangre fría, se pone a investigar y encuentra una serie de conexiones entre los asesinatos, en ese momento, es cuando empieza a asustarse de verdad.
Y reitero lo de que empieza a asustarse, porque aqui el único que lo hace es Ethan Hawke, porque como mucho, nos da un poco de mal rollo, pero en proporciones mínimas, un par de sustos causados, no por las escenas, sino por un subidón terrible de la música (A lo que yo denomino susto musical) Y poquita cosa más.
Lo peor de todo es que encima, tengo que escuchar como la gente dice ¡Qué pedazo de final! ¿Qué final? El final se sabe a los primeros quince minutos, no es necesario ser ni un lumbreras, ni Sherlock Holmes, ni nada por el estilo, es totalmente predecible.
Si hay algo que tengo que destacar, es a Ethan Hawke, un fantástico actor que dejó de hacer producciones del nivel, lo cuál es una pena.
Para mi, suspende rotundamente.
Valoración:****(4/10)
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