Si consumí con avidez la primera temporada de "Orange is the new black", con la segunda hice más de lo mismo, si la primera me gustó esta me encandiló, "Orange is the new black" es una serie que puede ser difícil de ver, al fin y al cabo se basa en diferentes personajes femeninos que tratan de sobrevivir en una cárcel femenina, relacionándose, negociando y sobreviviendo a muchos peligros.
El tema es el siguiente, mientras veía "Orange is the new black" me encontraba un poquito decepcionado, la falta de Alex Vause (Laura Prepon) y el extraño comienzo con Piper en la cárcel de Chicago y siendo trasladada y todo eso...Vamos, todo muy confuso, y es que hasta el capítulo cuatro aproximadamente las cosas no se arreglan y vuelven a las andadas.
Como ya dije con anterioridad, la segunda temporada de "Orange is the new black" se resiente en demasía de la falta de un villano, como ya no está Alex Vause ni tampoco la malvada Pennsatucky (Bueno, Pennsatucky está, lo que pasa es que no es villana como antaño)
Sin embargo, aparece una figura perfecta, la malvada Vee, interpreta a una villana excepcional, manipuladora hasta el exceso.
Desde el principio, desde el trailer de la segunda temporada de "Orange is the new black" se dejó entrever que iba a virar un poco hacia una supuesta guerra entre Red y Vee, recordemos que Red pierde la cocina y por ende todo su poder, Vee por el contrario, lo que hace es hacerse una familia poderosa.
Vee tiene la suerte de encontrar un vacío de poder con la marcha de Red, consigue manejar el contrabando de los cigarros y también de la droga dentro de la prisión, por lo que acaba reuniéndose de su gente, de las negras, para luchas contra las blancas y las latinas, caiga quien caiga.
Para ello va organizando su cruel negocio, utiliza a Crazy Eyes como el músculo de sus operaciones, tan loca está, que la propia Vee es capaz de meterla en la cabeza que ha hecho cosas que en verdad nunca ha hecho, alucinante.
Esta guerra le hace muy bien a "Orange is the new black", la convierte en una serie superior en la segunda mitad de temporada, empezó flojo y acabó remontando de manera espectacular.
Otras tramas de "Orange is the new black" me han resultado algo menos interesantes, como por ejemplo todo lo que se va desarrollando fuera de prisión, todo eso de que Jason Biggs le pone los cuertos a Piper con su amiga Polly.
Sin duda, si tengo que criticar algo de "Orange is the new black" son los flashbacks, la primera vez que vi este recurso fue en la serie de televisión "Perdidos", lo cierto es que los flashbacks iban a huevo, lo petaban en exceso, sin embargo en "Orange is the new black" a veces aburren un poco, no pegan ni con cola y eso es una verdadera pena.
Aun con todo "Orange is the new black" no deja de sorprenderme, es fresca, divertida, original y muy divertida, se sigue notando la producción y la mano de Netflix en este tipo de series de televisión, muchas ganas de empezar con la tercera temporada lo antes posible.
Valoración:*******(7/10)
Sin embargo, aparece una figura perfecta, la malvada Vee, interpreta a una villana excepcional, manipuladora hasta el exceso.
Desde el principio, desde el trailer de la segunda temporada de "Orange is the new black" se dejó entrever que iba a virar un poco hacia una supuesta guerra entre Red y Vee, recordemos que Red pierde la cocina y por ende todo su poder, Vee por el contrario, lo que hace es hacerse una familia poderosa.
Vee tiene la suerte de encontrar un vacío de poder con la marcha de Red, consigue manejar el contrabando de los cigarros y también de la droga dentro de la prisión, por lo que acaba reuniéndose de su gente, de las negras, para luchas contra las blancas y las latinas, caiga quien caiga.
Para ello va organizando su cruel negocio, utiliza a Crazy Eyes como el músculo de sus operaciones, tan loca está, que la propia Vee es capaz de meterla en la cabeza que ha hecho cosas que en verdad nunca ha hecho, alucinante.
Esta guerra le hace muy bien a "Orange is the new black", la convierte en una serie superior en la segunda mitad de temporada, empezó flojo y acabó remontando de manera espectacular.
Otras tramas de "Orange is the new black" me han resultado algo menos interesantes, como por ejemplo todo lo que se va desarrollando fuera de prisión, todo eso de que Jason Biggs le pone los cuertos a Piper con su amiga Polly.
Sin duda, si tengo que criticar algo de "Orange is the new black" son los flashbacks, la primera vez que vi este recurso fue en la serie de televisión "Perdidos", lo cierto es que los flashbacks iban a huevo, lo petaban en exceso, sin embargo en "Orange is the new black" a veces aburren un poco, no pegan ni con cola y eso es una verdadera pena.
Aun con todo "Orange is the new black" no deja de sorprenderme, es fresca, divertida, original y muy divertida, se sigue notando la producción y la mano de Netflix en este tipo de series de televisión, muchas ganas de empezar con la tercera temporada lo antes posible.
Valoración:*******(7/10)
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