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viernes, 4 de abril de 2014

Nymphomaniac: Vol. I (Nymphomaniac. Volumen 1)

Lars Von Trier no me parece un genio incomprendido, el danés me parece un genio empeñado en tirar su talento por el sumidero rodando tonterías y rodeando a sus producciones de una parafernalia y una polémica innecesaria, además, la mayoría de sus films son bastante deficientes, habiendo encontrado en "Nymphomaniac. Volumen 1" su mejor obra, además, con mucha diferencia ¿A qué se debe este insólito hecho? A que sin duda es la obra más alejado del estilo de Von Trier, y eso se agradece.
Como siempre, Lars Von Trier tiene que rodear a sus películas de ese halo polémico para que se hable de él, no es capaz de hacer como otros grandes directores, de los cuáles se habla gracias a su talento.
Total, un buen día, sale Von Trier hablando de que va a realizar una película sobre la ninfomanía, también sugirió que los actores, la mayoría famosos, mantendrían relaciones sexuales.
Como es obvio que no nos hemos caído de un guindo, eso no se lo creyó ni él, siendo el resultado final, una película que no contiene más carga sexual que series de televisión como "Spartacus" o "Juego de Trono", es decir, senos, culos un cunnilingus bastante púdico y algún que otro pene disperso, por lo demás, hablamos más de un recorrido dramático acerca de la ajetreada vida sexual de una enferma que de una orgía de sexo desenfrenado, creo de verdad que "Nymphomaniac. Volumen 1" se hubiera vendido mejor como lo que es, una película dramática de tintes independientes pero con caras conocidas.
La película se desarrolla tras el encuentro entre el personaje central, llamado Joe (Interpretado en su edad adulta por una de las musas de Von Trier, Charlotte Gainsbourg y Stacy Martin en su versión más joven) y un hombre bastante pesado, obsesionado por la pesca y los libros, interpretado por el siempre genial Stellan Skarsgard, juntos hacen un repaso por la enfermedad de la mujer, dejándonos los peores momentos de "Nymphomaniac. Volumen 1", en vez de mostrarnos más sobre la historia de la mujer, Von Trier empieza a hacerse pajas mentales (Nunca mejor dicho) y empieza a meter a los judíos, a Dios, a Pitágoras y a los satánicos, también insiste una y otra vez en el símil del sexo con la pesca, que hasta cierto punto tiene una gracia, pero que después definitivamente cansa al espectador...Aún con todo y pese a durar dos horas, a mi no se me ha hecho pesada (Y eso que la narración es bastante lenta) ya que hay que reconocer que el director danés, sabe mantener la atención en todos los momentos, ofreciéndonos una atrapante historia de la cuál no puedes apartar los ojos.
Lo más llamativo es la nómina de actores que ha conseguido reunir el bueno de Trier, el que más me ha sorprendido ha sido Christian Slater, al que las operaciones estéticas han deformado hasta el extremo, tanto, que no es capaz de hacer ningún tipo de mueca o gesto para enfatizar sus emociones, una auténtica lástima porque después de grandes películas como "Amor a quemarropa" se ha quedado en producciones de serie B, producciones de mala muerte.
Por lo demás, he de decir que la parte en la que Uma Thurman aparece me ha gustado más bien poco, nada queda ya de la musa de Quentin Tarantino, sobreactuada y mala, al contrario de Shia LaBeouf, un actor odiado por muchos (Y con razón) pero que realiza un gran papel.
Me da mi que la mutilación de "Nymphomaniac" va a restar puntos a la segunda parte ¡Ocho horas duraba la primera versión! Tenía que haberlo reducido a tres como mucho y dejarse de los dos volúmenes...Veremos en que queda la cosa.
Valoración:******(6/10)

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