La segunda temporada de "Black Mirror" sigue la brillante y triunfal estela de la primera, creando un conglomerado de historias con una calidad excepcional, vuelve a seguir la fórmula que ya vimos con anterioridad, y además, no baja de calidad, sigue ofreciéndonos un producto muy interesante capaz de remover la conciencia de todos, me atrevería a decir que hay poca gente que se atreva a ver estos tres capítulos de golpe (Aunque se podría, porque su duración es la de un capítulo normal) porque requieren un trabajo después, requieren un poquito de reflexión y de pensar en lo que hemos visto.
Mi pregunta es ¿Hasta cuanto seguirá Charlie Brooker alumbrándonos con esas genialidades? Ya se ha realizado un especial de Navidad llamado "White Christmas" con un Jon Hamm excepcional ¿Podrá seguir así? Mientras tanto aprovecharemos para disfrutar de la calidad que ya tenemos.
El primer episodio a analizar es el llamado "El Momento Waldo" que cuenta con el gran Jason Flemyng en sus filas, "El Momento Waldo" es una mordaz crítica al sistema político y a lo borregos que somos los votantes de todo el mundo.
Waldo es un personaje de dibujos tan popular que quiere presentarse a las elecciones británicas, la gente le sigue y aplaude todo lo que dice porque representa una cosa diferente al sistema político tradicional instaurado en el mundo occidental, no dice demasiado, tampoco promete nada, pero es rompedor, nuevo y la gente está ciertamente descontenta y desesperada con lo que ve que es capaz de dar su voto a un personaje animado, es decir, a una cadena de televisión ¿No os suena a la situación que estamos viviendo en España en estos momentos? Espero que no acabemos como acaban todos al final de "El Momento Waldo", dicen que es el peor episodio de "Black Mirror" pero a mi me ha resultado magistral, de hecho, uno de los mejores.
El segundo episodio se llama "Ahora mismo vuelvo" y está protagonizado por dos de los actores británicos más talentosos del mundo, Hayley Atwell ("Agent Carter") y Domhnall Gleeson ("Una cuestión de tiempo") ambos están en una relación y cuando el chico fallece, la novia cae en una profunda depresión, le comunican que es posible reconstruir a su novio en forma de robot y rápidamente su mundo se vuelve a venir arriba, su nuevo novio es perfecto, es educado y las relaciones sexuales son estupendas, sin embargo se da cuenta de que las máquinas, aunque sean perfectas, jamás podrán sustituir las emociones de una persona humana
En definitiva "Ahora mismo vuelvo" es una sátira y una crítica a la evolución de los robots y de como poco a poco se van introduciendo en la vida de la gente.
Para finalizar, nos encontramos con una de las mejores historias de todas, "Oso Blanco", una mujer se despierta y ve que la mayoría de personas se han convertido en zombis que van haciendo fotos con su móvil a todo lo que se mueve, los que no han sido infectados por eso son asesinos que actúan como en la película de "La Purga".
Lo mejor de todo es la revelación que tendremos al final del capítulo, final que se relaciona con el mito de Sísifo, la piedra y la montaña.
"Black Mirror" es muy, pero que muy buena, tiene un nivel de calidad excepcional y espero como agua de mayo una tercera temporada, aunque entiendo que se tomen su tiempo en escribir estas maravillas.
Valoración:**********(10/10)
No hay comentarios:
Publicar un comentario