The Ron Clark Story (Unidos para triunfar)

En lo referente a la organización, vemos claramente como el director del centro, interpretado por Ernie Hudson, ha perdido completamente la ilusión, ha establecido unas normas y se ha instaurado en la más completa monotonía, creando por ende un mal clima de trabajo, es más, no está para nada abiertos a los cambios de ningún tipo y no quiere que los profesores innoven. Ha colocado una etiqueta de perdedor a cada alumno no entra en razón, estas técnicas de trabajo solo consiguen que los profesores más motivados, como el protagonista Ron Clark (Interpretado por Matthew Perry) se desesperen y no logren conectar con el alumnado.

 El final de este punto nos conduce sin lugar a dudas a la innovación, cuando el profesor llega al aula es consciente de las necesidades de los alumnos, son chicos marginales a los que la sociedad ha rechazado, ellos se han creído este papel y necesitan disciplina y un guía que les ayude a encontrar el camino mejor, sin embargo, el profesor no solo se tendrá que encontrar con la ardua tarea de batallar con los alumnos, sino que además tiene que luchar contra las instituciones, sus superiores y además, las familias que no entienden porque un profesor se preocupa de repente por sus hijos.

 Las primeras acciones que realiza el profesor son por el desconocimiento de las reglas, de cómo se trabaja en el centro, en definitivas cuentas, de cómo es la cultura del instituto, esto es por falta de información y por culpa de una nefasta comunicación, para que un profesor desempeñe su trabajo de forma óptima debe disponer de la máxima información posible, ya no de los alumnos, sino del centro en general.

La implicación de Ron Clark es total, ama su trabajo y lo vemos, bien es cierto que cuando se acercan momentos complicados está cerca de abandonar, pero finalmente es tenaz y no se arrepiente en ningún momento.

En los momentos finales, cuando las chavales han conseguido grandes notas, Ron Clark está exultante, probablemente gane poco dinero y no será reconocido por la sociedad, pero la labor que ha llevado a cabo le ha convertido en la persona más feliz y orgullosa del mundo, puesto que sus niños pueden hacer todo lo que les apetezca sin que nadie les etiquete antes de tiempo.

En lo que respecta a las relaciones, podemos ver como Ron Clark encarna lo que tiene que ser un buen profesor, en primer lugar, tiene que establecer una especie de línea invisible, la línea establecerá los roles de cada sujeto en el aula.

La película nos enseña que la autoridad y la disciplina son completamente necesarias, obviamente, todo ello entendido desde un punto de vista positivo, nunca entiendo que la figura del maestro se halla en una posición de dignidad moral superior al alumno, pero sí que tiene que establecer unos límites mínimos.

Por otro lado, me ha llamado la atención que relacione la clase con una familia, todos se apoyan, todos se quieren y ninguno se queda atrás, no busca la competitividad, que conlleva que unos lleguen al objetivo y otros no, sino que apuesta por la cooperación en la que unos y otros se ayudan para que todos puedan alcanzar la meta.
Ron Clark tiene en su metodología un punto muy importante, sin motivación no hay aprendizaje, él se dedica a motivarlos y a acercarse a sus gustos personales, de ahí que se interese por el rap (Rap de los presidentes) y a saltar a la comba con una de las chicas más conflictivas de la clase.

Sinceramente, creo que debe ser ciertamente frustrante el trabajar sin el apoyo de tus superiores, de ahí que el desánimo se extendiera por Ron Clark en la primera parte de la película, sin embargo luego podemos analizar y ver un pequeño cambio en la personalidad del director del instituto, comienza a creer en los alocados y novedosos métodos de Ron Clark y a volver a recuperar esa ilusión que posiblemente tenía cuando empezó en el mundo de la docencia.
Valoración:******(6/10)